Tenemos costumbres diferentes en cada casa, pero además existen hábitos comunes que en otros países ni se plantean o jamás han existido.

Hay cosas que normalizamos pero que en hogares extranjeros probablemente no verás nunca.

Estas son las costumbres domésticas españolas que no lo son en otros países:

 

El uso de persianas y cortinas

persiana

Hay lugares en los que las persianas están sobrevaloradas, no las busques porque no hay.

Por su falta de luz los lugares nórdicos no usan persianas, por lo tanto, cualquier rayito de sol es bienvenido.

Actualmente España es uno de los pocos países que las mantiene.

¿Entonces viven en escaparates? Prácticamente si.

 

 

La lavadora en cualquier rincón de la casa

lavadora

En España, la lavadora la adoptamos en el baño o en la cocina posiblemente por falta de espacio.

¿Qué es normal en otros países? Tener un cuarto para lavar la ropa en casa o lavadoras comunitarias para todo el edificio

 

El mueble de los abuelos o mueble castellano

muebles antiguos

Si, estamos hablando de esos muebles de pino oscuros y rococós que tanto evitamos cuando vamos a alquilar una casa, aunque para algunos sean auténticas piezas vintage que siempre tienen una segunda vida.

Este tipo de muebles no son nada comunes en otros países.

 

Tendemos la ropa a la vista

ropa tendida

No te pienses que todo el planeta seca su ropa colgándola en su balcón o en un tendedero, eso es tipical spanish.

 

Mortero, jamonero, aceitera, paellera

paellera 

Hay objetos de cocina que por mucho que los busques en los cajones de otros países no los vas a encontrar porque son tradiciones muy nuestras.

 

La siesta

siesta

 

La siesta es una de las costumbres más españolas y como tal, para un español un sofá más que decorativo, debe ser ante todo cómodo.

Invertir en un sofá bueno es algo imprescindible.

 

El bidé, un imprescindible en nuestros hogares

cuarto de baño 

Es un elemento que se está perdiendo pero que es un clásico de los hogares españoles: un bidé en el cuarto de baño para acceder más rápidamente a una higiene intima o por temas prácticos a una toma de agua más cómoda sin necesidad de abrir la ducha o la bañera.

 

Cultura de bar

bar

 

Es indiscutible que hacemos la mayoría de nuestros planes sociales alrededor de …

¡un bar! Mientras que lo más habitual en otros lugares es organizar cenas, comidas y meriendas en las propias viviendas.

Quedar para cocinar nos parece aún muy extraño y preferimos que nos lo den todo hecho.

 

No nos descalzamos al entrar

descalzo

 

Eso de llegar a casa y conforme entramos descalzarnos no es muy común.

Quizás ahora con la pandemia lo hemos aplicado más a nuestra rutina como siempre han hecho otros países.

Pero jamás nos ha preocupado entrar a nuestras casas o a las ajenas con los zapatos de calle.

Ahí observamos que es más común el suelo enmoquetado y las alfombras en otros lugares en los que sí es común descalzarse.

 

¿Qué otras costumbres hogareñas crees que nos diferencian de otros lugares del mundo? ¿Sin cual no podrías vivir?

 

¡Cuéntanoslo!